Ponle mi nombre al lunar de tu mejilla. Dile a tu oído que me escuche cuando miro. Salva mis manos con el roce de tu espalda. Dame el remedio para no curarme nunca, es que es tan fácil respirar; el aire cuando estás siempre es tan fácil.
Quítame un beso, póntelo donde prefieras. Dame un pretexto para reestrenar mi vida.
Dame lo que quieras darme; quítame lo que tu quieras.
mi Richard.
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