jueves, 4 de julio de 2013

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Escucharte describirte tan parecido a mí, asusta. Se te nota la ansiedad en los ojos. Admitís que muchas veces tenés pila de cosas para decir, pero al no tener la certeza de cómo va a ser la recepción, te callás. 'Quiero decirlo, pero no sé si tengo las herramientas para hacerlo', dijiste. Y es exactamente lo que me pasa cuando te tengo adelante. Sé lo que quiero decir, pero tampoco tengo la capacidad para hacerlo. 
Sos la enfermedad más linda que tuve. Sinceramente, estoy feliz de la locura en la que me sumerjo cada vez que hablo de vos. Decir 'Santi dijo...', con total impunidad. '¿Santi? ¿Qué Santi?' - 'AYSINE'. Qué tal? amigos de toda la vida! Pero soy inmensamente feliz, de verdad. Lo dije muchas veces durante el último mes. Yo te conocía, pero el 13 de junio, TE ENCONTRÉ. Y no es coincidencia que eso, haya hecho que me encuentre a mí, que tan perdida estaba. Giré el rumbo de mi vida y me acomodé en el carril correcto. A lo mejor es eso lo que muchos no pueden ver. Vos estás haciendo realidad tu sueño. Yo voy por el mío. Y como dijo Pato: 'Es que la gente que no crea en sueños, no creerá en lo que hago. Porque este sueño es la razón de mi vida para seguir soñando'.
Y lo mejor que te escuché decir: 'Me involucré sentimentalmente con alguien que no conocía', salvando las distancias... que parecidos somos. Ojo! Quién te dice, Aysine? Puede que al final termine teniendo razón. Yo ya te lo avisé, mi amor.

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