
Pensar que voy a ser la tía vieja de tus hijos. La que tenga olor a polvo base de avón, los labios mal pintados, y una casa con olor a vieja. Pero bueno. Me lo aguanto.
No podría estar lejos tuyo chiquitito. Porque me das toda la paz que necesito. Porque me hacés la más feliz solamente con reirte. Cuando me das besos, me abrazas o dejás de jugar para decirme que me querés hasta el cielo, te comería a besos. Todas las veces que me decís que me quede a dormir, que vos me prestas tu camita. Todas, pero todas las veces que hablas por teléfono conmigo. Cuando te quejas porque hace mucho que no te traen a casa. Cuando lloras porque no querés irte. Cuando te escondes y gritas 'te encontré'. Cuando decís 'dejame papá, quiero jugar con mi hermana'. Nunca nadie va a entenderlo. Sos muy chiquito. Pero el más inteligente. No me quedan dudas.
Te amo memelcito. Gracias por hacerme tan, pero tan, feliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario