Fuiste de esos amores que, se sabe, nunca se olvidan. Todavía me acuerdo nuestro primer beso (aunque era el segundo, pero por algún motivo el de aquella vez, perdió validez), que nos miramos y nos dejamos caer en la tentación de arruinar todo eso que alguna vez construimos.
Pero tuvimos algo de verdad, los dos sentíamos, los dos queríamos y en algún momento, los dos amamos. Era tan hermoso. Conocerte tanto, que me conozcas tanto. No había chances de mentirnos, a lo mejor por eso no funcionó. A tus relaciones siempre las basabas en engaños, y conmigo eso era imposible.
Tengo una sensación de olvido frustrado, una nostalgia por lo que no fue. Teníamos mucho más para dar, para hacernos felices. A veces no entiendo cual es el concepto de ‘libertad’. Y mucho menos comprendo que quieran solucionar las cosas con un: ‘todo pasa por algo’. Admito que más de una vez fui presa de esas palabras, debido a esa limitación que sentía a la hora de hallar dentro de mí esas respuestas que escaseaban y eran más que urgentes.
Fuiste tan cariñoso como cruel. Tus palabras, más de una vez, me arruinaban sin piedad. Estallaban destrozando todo mi interior. Y por primera vez; la muralla externa iba perdiendo forma. Vos crees que el amor no es un estilo de vida, y lograste inculcarme esos principios absurdos e irrealistas. Dejando como falso aprendizaje que la diversión es el único estandarte correcto. ERROR; yo supe verlo, vos todavía no.
Creo que crecí de ayer a hoy, creo que comprendí que fuiste el único que consiguió cruzar las barreras que puse toda mi vida a modo de protección. Vos entraste y rompiste mis esquemas. Y hoy, casi 8 meses después de nuestra historia de amor, puedo confirmar que fuiste el único. Ese que siempre que invade mi mente, se gana una sonrisa… o una lagrima en el peor de los casos.
No vas a poder creer que diga esto sobre vos, pero sí; es para y por vos. No te olvides nunca de eso que alguna vez nos hizo felices, prometo no hacerlo. Te amo.
Pero tuvimos algo de verdad, los dos sentíamos, los dos queríamos y en algún momento, los dos amamos. Era tan hermoso. Conocerte tanto, que me conozcas tanto. No había chances de mentirnos, a lo mejor por eso no funcionó. A tus relaciones siempre las basabas en engaños, y conmigo eso era imposible.
Tengo una sensación de olvido frustrado, una nostalgia por lo que no fue. Teníamos mucho más para dar, para hacernos felices. A veces no entiendo cual es el concepto de ‘libertad’. Y mucho menos comprendo que quieran solucionar las cosas con un: ‘todo pasa por algo’. Admito que más de una vez fui presa de esas palabras, debido a esa limitación que sentía a la hora de hallar dentro de mí esas respuestas que escaseaban y eran más que urgentes.
Fuiste tan cariñoso como cruel. Tus palabras, más de una vez, me arruinaban sin piedad. Estallaban destrozando todo mi interior. Y por primera vez; la muralla externa iba perdiendo forma. Vos crees que el amor no es un estilo de vida, y lograste inculcarme esos principios absurdos e irrealistas. Dejando como falso aprendizaje que la diversión es el único estandarte correcto. ERROR; yo supe verlo, vos todavía no.
Creo que crecí de ayer a hoy, creo que comprendí que fuiste el único que consiguió cruzar las barreras que puse toda mi vida a modo de protección. Vos entraste y rompiste mis esquemas. Y hoy, casi 8 meses después de nuestra historia de amor, puedo confirmar que fuiste el único. Ese que siempre que invade mi mente, se gana una sonrisa… o una lagrima en el peor de los casos.
No vas a poder creer que diga esto sobre vos, pero sí; es para y por vos. No te olvides nunca de eso que alguna vez nos hizo felices, prometo no hacerlo. Te amo.
Julio de 2008
No hay comentarios:
Publicar un comentario