La envidia hacia mí no te deja dormir, en cambio tu envidia alimenta mi ego. Hablas de mí, funcionas por mí; no salgo de ti ni por sólo un momento. No voy a dejar que me hundas jamás. Si me quiero hundir, yo me hundiré sola. Tu esfuerzo no sirve pero yo te entiendo que lo haces por ocio y me haces famosa. Mira todo el bien que me has hecho, me quieres desviar pero sigo derecha. La gente que ocupo la tengo conmigo; no haces daño.
Te crees muy alzada al hablar mal de mí, pero a mis espaldas cualquiera podría. Te reto a que lo hagas frente a mi cara, no tienes valor.
Panda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario